Bebes en el avion

Una simple tarjetita con un aviso: Somos papás, estamos con unos bebés mellizos en el avión, no queremos molestar a nadie, pero tenemos que hacer el viaje. Pedimos disculpas de antemano (y de una manera simpatiquísima), acá hay algunas golosinas de regalo por la molestia, y por si los bebés llegan a molestar mucho, tenemos auriculares a disposición.

Bicicleta, buen gesto de amabilidad

Una carta al diario contando de un caso particular: un padre o madre no podía comprarle una bicicleta a su hijo hasta que un extraño en el parque (que escuchó la charla que estaban teniendo), se acercó y le dio $350 al nene para que compre una, porque «ningún chico debería estar sin bicicleta en el verano».

Disney: El guardia y la princesa

Un guardia de los parques Magic Kingdom de Disney que ve entrar a una nena vestida de princesa y le dice «Discúlpeme, Princesa. ¿Podría darme un autógrafo?».

Esos son 3 de los 16 pequeños ejemplos de amabilidad increíble o inesperada que se pueden ver en éste post de Buzz Feed (que ¿lamentablemente? está todo en inglés). En algunos casos es casi como si se tratara de una «cadena de favores», en algunos son pequeños gestos que no cuestan nada, y algunos costaron su plata también.

Todas diferentes maneras de mejorar el mundo. No quejándose de las cosas malas por la calle o en Twitter o Facebook, sino saliendo a esa misma calle, teniendo contacto con las necesidades y tristezas de los demás, y marcando la diferencia en el mano a mano. 🙂