Era nuestro perro y era la ternura, que nos hace falta cada día mas. Era una metáfora de la aventura que en el diccionario no se puede hallar.

Era el callejero de las cosas bellas, y se fue con ellas cuando se marcho. Se bebió de golpe todas las estrellas. Se quedo dormido y ya no despertó.

Nos dejo el espacio como testamento, lleno de nostalgia, lleno de emoción. Vaga su recuerdo por mis sentimientos para derramarlos en esta canción.

Prometo que éste post y listo.